Mariela es una apasionada por el bordado en cinta y las manualidades. Desde que comenzó a asistir a la Casa de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres de Barrios Unidos, ha convertido este arte en su negocio.
Una mujer emprendedora
Mariela tiene tres hijos; el mayor se llama Javier, la segunda Cristina y la tercera Andrea, todos profesionales.
Siempre ha sido una mujer emprendedora. Antes se dedicaba a hacer postres, pero descubrió su pasión por el bordado en cinta en la Casa de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres-CIOM, en ese entonces ubicada en el barrio José Joaquín Vargas. Desde ese momento, vio una oportunidad para crecer económicamente a través de esta habilidad.
Su pasión por el bordado en cinta
A raíz de haber aprendido mucho sobre este arte en la CIOM, Mariela y Alba capacitan y forman a las mujeres que asisten a la Casa de Igualdad de Oportunidades para las Mujeres de Barrios Unidos, en materia de bordado en cinta, con el fin de que ellas aprendan y puedan crear sus propios emprendimientos. ‘’Para mi emprender significa alegría, me gusta enseñarles a mis compañeras lo que sé’’, añade.
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